8.000 jóvenes participan en el proceso de participación ciudadana sobre energía que llevará Democracia Digital al Congreso

Más de 8.000 jóvenes han participado en la encuesta de El Futuro es Energía, iniciativa del proyecto de participación ciudadana El Futuro es Ahora, iniciativa que nació en 2020 de la mano de varias entidades. Este proyecto busca dar voz a la juventud sobre la transición energética y el cambio climático, recogiendo sus propuestas e inquietudes. Los resultados de la encuesta se presentarán en el Congreso de los Diputados, buscando generar impacto en las políticas públicas y promover un debate sobre un modelo energético sostenible.

La encuesta aborda temas clave como la necesidad de impulsar las energías renovables, la eficiencia energética y las políticas que pueden acelerar la transición hacia un modelo energético más respetuoso con el medio ambiente. Además de su presentación en el Congreso, este esfuerzo forma parte de una campaña de sensibilización más amplia que busca movilizar a la sociedad en torno a la transición energética y al papel crucial que los jóvenes desempeñan en el futuro del país.

El Futuro es Ahora: Un esfuerzo colectivo

El proyecto El Futuro es Energía se enmarca dentro de El Futuro es Ahora, una iniciativa que reúne a varias entidades comprometidas con la participación juvenil en temas cruciales como la energía, la democracia y la sostenibilidad. Democracia Digital, junto con otras organizaciones como Talento para el Futuro, ha trabajado en colaboración para garantizar que los jóvenes tengan un papel activo en la construcción de un futuro más sostenible, asegurando que sus voces sean escuchadas en las esferas políticas y sociales, reuniendo sus reclamas sobre el futuro de la Energía.

La presentación en el Congreso será un hito en este proceso, que no solo busca concienciar sobre la importancia de las energías renovables, sino también promover una colaboración intergeneracional en la toma de decisiones. El objetivo es influir en políticas públicas y poner en el centro de la agenda política la transición hacia un modelo energético más equitativo y sostenible, donde los jóvenes sean protagonistas activos del cambio.